… Y entonces los dramas se nos vuelven un vicio, como el sexo y los chocolates, y una se aguanta de aventar “hijosdeputa” por la boca, pero hay varias que los avientan como estornudos de alergia al parirlos; no hablo de aquellos, hablo de los dramas que nos hacen exquisitas y no es que nos odien por altaneras o por amigas imaginarias de los ebrios y locos poetas es sólo un placer, mutuo y unísono placer, y no bukakiano, es sencillamente un secreto de vida.

Las que parimos dramas y secretamos morbo, sonrientes y frondosas, a veces mascotas y esclavas de lo indecible, además amantes de los silencios incómodos pero por sobretodo de las buenas cogidas, estamos, bonitas y sobrevivientes de la censura, estamos aquí en Dramas…


jueves, 24 de julio de 2008

Cumpleaños



No he lavado las sábanas. Todavía anoche estuve oliéndolas y recordando. Poco faltó para que me la metiera por la oreja. Me duele la vagina. Es normal me dijo Luz, la vecina piruja de mi madre, la que no grita ni aunque se la coja un caballo. Trece horas estuve hoy frente al espejo: “Estás bien pinche celulítica, pero que buenas nalgas tienes”, lo amo porque me coje de perrito. Lo amo porque me obliga a chupársela. Un día se la vomité. Se emputó y me puso una santa madriza que hasta lo drogada se me fue para el otro hemisferio. Hoy cumplo 40 años. No lo recordó el puto. Le llamé hace rato y se escuchaban carcajadas, estaba con Tamara, la lolita que se consiguió en una secundaria. Pinche escuincla puta, yo a su edad jugaba con muñecas; bueno y se la chupaba a veces al profesor de música, pero no por puta, sino por una calificación decente.
“Ten hijos Leonilita, ten muchos bebes y cásate mija, no me mortifiques”, chinga tu madre. Mi mamá era una mortificada del señor, una beata que por las noches tragaba tacos de azúcar para calmar la calentura. Mi papá se la jalaba hasta entrada la mañana. Una, dos, tres, diez veces. Mi padre me dejó unas revistas bien califas cuando murió, hay posiciones que duelen un chingo pero al Pedro le encantan, “Mija, deja te muerdo la nalga, no?” y me la muerde y me la deja con moretes bien feos. Amo al Pedro y a sus vestidos de jaguar, sus tacones altos y picudos. Amo al Pedro porque me coge de perrito y me hace sentir mujer, su mujer.



María Fernanda Iñiguez Romero

8 comentarios:

Marietta Dedalus dijo...

Jajajajajajaja, y mi mamá: 'pos qué tanto lees, a ver...' :|!!! Un pinchi chiste má, jumm... mensa!

Al inicio dije, íra ésta que no se agüita ¡fuera ficción, yeeeh! jajajajaja Ya después dije, ah no...no pos no, jajaja te quedó perro hija. Merece un brindisss.

Tvo pronto. Chausines, faltó la otra imagen, también taba perra. :D

Te quiero.

Marietta Dedalus dijo...

Otra vez lo leí, jajajajajaja retehija de la chingada...

No me dejaste mail eh burrita!!!

Anónimo dijo...

ya me creio la verga

Rosminda Perlasca dijo...

Hay anónimo que triste que te crezca con ésto, no mijo, no crece, se para....pobre iluso, luego se te regresa como era...pipipipi

Anónimo dijo...

Yo no tengo la culpa que seas muy niña y que te guste el baile.... rosminditita

Marietta Dedalus dijo...

jajajajajajjjajajajajajaaaaa paaareeeen!!!! pinchis anónimos ni tan anónimos, jajajaja qué cagados!

Rosminda Perlasca dijo...

jajajaja, me suena a los mensos de chapis o pepino, a huevo...jajaja, mensos anónimos jajaja, le ponen sal a esto eda?, rosminditita jajajaja ay no! no! se la llevan me cae.

Marietta Dedalus dijo...

pinchi mataviejitas!

Metro-metro, metrosexual (8)!!!!!

Rosmindititita!!!! jajajaja... ya subiré yo pronto yo eh mija. lo juro por ésta +.